Para los emprendimientos, conseguir una persona dispuesta a invertir en sus ideas es un gran logro. Pero un inversionista muchas veces no es solo una persona que abre su billetera para ayudar; se trata de una relación a largo plazo que habrá que cuidar desde el principio.
Una inversión temprana, estadísticamente significa que el emprendimiento tendrá éxito, de acuerdo con estudios hechos por Crunchbase, un sitio sobre emprendimientos globales y con bases de datos de ideas alrededor del mundo. Al momento de hablar de inversiones, lo primero que mencionan es la importancia de establecer una relación de confianza, reconocer desde una perspectiva diferente las fortalezas y debilidades del emprendimiento y conocer las ventajas que puedes tener para negociar cuando sea necesario.
Conseguir un inversionista y que este desembolse un dinero no es el final de un acuerdo, será el comienzo y expertos sobre el tema tienen tres consejos que darte y tener en cuenta cuando ese momento llegue.
No te fijes únicamente en el dinero
Aunque esta es la función principal de un inversionista, el primer consejo de Deepak Malhotra, profesor de administración en la Universidad de Harvard, es que consideres el contrato como firmar un matrimonio; esto quiere decir que, aunque la negociación sea larga, la relación no finaliza allí, hasta ahora empieza, y sin opción de divorcio.
Dentro de la negociación es importante, además de cuánto necesita tu emprendimiento para salir adelante o alcanzar logros específicos, tener en cuenta el control que tendrás sobre este después de recibir el dinero, cuánto poder estas cediendo y como comprometes el derecho a tomar decisiones.
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Como anécdota, cuenta sobre un emprendimiento que logró recibir más de los que esperaba en inversión, pero en su afán el fundador no tuvo en cuenta el futuro y lo que estaba intercambiando por una cantidad que tenía fija en su cabeza.
Por esto, es importante crear una relación en la que se puedan hacer preguntas antes de firmar cualquier documento, donde ambas partes expresen sus expectativas, expliquen en qué están dispuestos a ceder y qué no. De este modo, se sabrá qué esperar y si la inversión es una relación que vale la pena cultivar. La confianza de ambas partes será clave para las dinámicas que se vienen después.
Escuchar a tu inversionista antes de proponer
Aunque tú conoces mejor que otra persona las necesidades de tu emprendimiento, Crunchbase recomienda no ser el primero en poner una cifra sobre la mesa. Escuchar la propuesta de la otra parte, conocer que reconoce como tus ventajas y fallas es una forma de medir en una nueva perspectiva tu start-up. De este modo, sabrás porqué te está ofreciendo esa cantidad y hacer una contrapropuesta desde ahí.
Por su parte, Malhotra también propone algo muy similar, en su documento asegura que pensar desde ambas perspectivas te ayudará a evaluar las expectativas del inversor y saber si podrás cumplir con estas o si debes primero aclararlas.
Esto también le dará oportunidades a la otra parte para hacer preguntar y conocer al fundador más allá del emprendimiento. muchas veces de esta parte de la negociación se define el éxito o no de la inversión. Pues muchos buscan más que grandes ideas, emprendedores apasionados por lo que hacen y por su misión.
Haz tu tarea: investiga a tu inversionista para considerar una relación a largo plazo
Aunque te dijimos que no debes ser el primero en proponer, si es recomendable que para iniciar las negociaciones tengas una idea de tus ventajas y puntos a mejorar. De este modo, sabrás cuánto esperar de un inversionista y dudar en caso de que ofrezca mucho o dejar la negociación cuando la cifra esté muy por debajo. Esto también te permitirá evaluar que estarás dispuesto a ceder o a mantener para que durante la negociación no te coja por sorpresa.
Saber qué hace atractivo tu emprendimiento a la vez te permitirá reforzar tus propuestas durante la negociación y explicar de dónde y cómo esperar alcanzar los objetivos que propongas a tus inversionistas. Finalmente, te permitirá evaluar si estos pueden ayudar, más que financieramente, en mentoría y soporte estratégico.
Aunque este último consejo puede estar demás, es importante reforzar que toda negociación debe estar acompañada por un abogado especialista y con experiencia en este tipo de temas que entienda de términos específicos. También es recomendable que conozcas contratos firmados por emprendimientos similares a los tuyos, emprendimientos que hayan firmado con el inversionista con el que realizas la negociación, las decisiones que se tomaron y los términos de estas para saber qué esperar después de firmar el contrato.
Fuente: Enter.co Por Diana Arias | START-UPS ARGENTINA